La célula es la unidad vital, anatómica, fisiológica y de origen que conforma los tejidos, órganos y sistemas de todos los seres vivos.

Todas las células poseen vida, órganos y mecanismos propios para asegurar su subsistencia: pueden reproducirse, nutrirse, excretar y morir. Son la unidad anatómica y morfológica de todos los seres vivos porque todos están constituidos por una o más de ellas. De una célula se originan las demás: toda célula proviene de otra célula ya existente.

Las células pueden clasificarse según varios criterios:

Clasificación general de la célula

• Según su núcleo/ organización: procariota (organismo procarionte, sin núcleo celular) o eucariota (organismo eucarionte, con núcleo celular).
• Según el reino al cual pertenezca el organismo que conforma: célula de arquea, célula de bacteria, célula de animal, célula de planta, célula de hongo, célula de protista o célula de chromista.
• Según su número/agrupación: de organismo unicelular, de organismo pluricelular o de organismo colonial.
• Según su forma y tamaño.
• Según su función.
• Según su pared celular y sus organelos característicos.
• Según su alimentación: autótrofa, heterótrofa o ambas.
• Según su respiración: aeróbica, anaeróbica o ambas.
• Según su división celular: fisión binaria, gemación, esporulación, mitosis o meiosis.
• Según su reproducción: sexual, asexual o ambas.
• Según su carga cromosómica: haploide (células sexuales) o diploide (células somáticas).

Clasificación de la célula procariota

• Según el reino al cual pertenezca el organismo procarionte que conforma: célula de arquea o célula de bacteria.
• Según su número/ agrupación: de organismo unicelular o de organismo colonial.
• Según su morfología (forma): coco, bacilo, vibrio, espirilo, lobulada, plana, poligonal, pleomórfica (variante), etc.
• Según el tipo de envoltura celular: pared celular delgada, gruesa, inexistente, etc.
• Según si realiza o no la fotosíntesis.
• Según su alimentación: autótrofa, heterótrofa o ambas.
• Según su respiración: aeróbica, anaeróbica o ambas.
• Según su división celular: fisión binaria o esporulación.

Célula arquea

• Según las condiciones ambientales de donde habite: extremófila (condiciones de temperatura, salinidad, acidez, alcalinidad, desecación, presión, radiación y/u oxígeno extremas) y mesófila (condiciones ambientales con temperatura y humedad moderadas).

Célula bacteriana

• Según el grosor de su pared celular y de como reaccionan los componentes de la misma ante ciertos pigmentos: bacterias Gram positivas o monodérmicas y bacterias Gram negativas o didérmicas.
• Según su movimiento: inmóviles y móviles (con flagelos, psudópodos, cilios o pilis).
• Según las condiciones ambientales de donde habite: extremófila (condiciones de temperatura, salinidad, acidez, alcalinidad, desecación, presión, radiación y/u oxígeno extremas) y mesófila (condiciones ambientales con temperatura y humedad moderadas).

Clasificación de la célula eucariota

• Según su número de núcleos: célula de un núcleo, célula binucleada, célula polinucleada o, incluso, célula anucleada (célula eucariota sin núcleo).
• Según el reino al cual pertenezca el organismo eucarionte que conforma: célula animal, célula vegetal, célula fúngica, célula protista o célula chromista.
• Según su número/agrupación: de organismo unicelular, de organismo pluricelular o de organismo colonial.
• Según su morfología (forma): redondeada, alargada, tubular, rectangular, romboidal, esférica, amorfa, etc.
• Según si tiene o no pared celular, la composición de dicha pared celular (celulosa, quitina, etc.), si tiene o no plastos y si realiza o no la fotosíntesis.
• Según su alimentación: autótrofa, heterótrofa o ambas.
• Según su respiración: aeróbica, anaeróbica o ambas.
• Según su división celular: gemación, esporulación, mitosis o meiosis.
• Según su reproducción: sexual, asexual o ambas.
• Según su carga cromosómica: haploide (células sexuales) o diploide (células somáticas).

Célula animal

• Según su función en el organismo/ el tejido que conforma: célula nerviosa, célula sanguínea, célula sexual, célula madre, célula intestinal, célula muscular, célula epitelial, célula ósea, etc.
• Según su división celular: gemación, mitosis o meiosis.
• Según su reproducción: sexual, asexual o ambas.
• Según su carga cromosómica: haploide (células sexuales) o diploide (células somáticas).

Célula vegetal

• Según su función en el organismo: célula de soporte, célula epidérmica, célula fotosintética, célula sexual, etc.
• Según el conjunto de tejidos que componen: del floema, del xilema, del parénquima, del colénquima, del meristema o del esclerénquima.
• Según su división celular: esporulación, mitosis o meiosis.
• Según su reproducción: sexual, asexual o ambas.
• Según su carga cromosómica: haploide (esporas o gametos: células sexuales), diploide (células somáticas) o poliploide.

Célula fúngica

• Según su número de núcleos: célula de un núcleo, célula binucleada, célula polinucleada o célula anucleada.
• Según su número/agrupación: de organismo unicelular, de organismo pluricelular o de organismo colonial.
• Según su función en el organismo: vegetativa, reproductiva, de soporte, etc.
• Según su morfología (forma): alargada y tubular, redonda, etc.
• Según la hifa: si conforma (septada o sinfonada) o no.
• Según si tiene o no cuerpos de Wöroning .
• Según su división celular: gemación, esporulación, mitosis o meiosis.
• Según su reproducción: sexual (esporas), asexual (conidióforos) o ambos.
• Según su carga cromosómica: haploide o diploide.

Célula protista

• Según su número de núcleos: célula de un núcleo, célula binucleada o célula polinucleada.
• Según su número/ agrupación: de organismo unicelular o de organismo colonial.
• Según su morfología (forma): alargada, ovalada, amorfa, etc.
• Según sus órganos efectores: pseudópodos, cilios, flagelos, sin órganos efectores, etc.
• Según su alimentación: autótrofa, heterótrofa o ambas.
• Según su reproducción: sexual, asexual o ambas.
• Según su división celular: gemación, esporulación, mitosis o meiosis.
• Según su carga cromosómica: haploide, diploide o poliploide.
• Según el medio en el que habita: ambientes húmedos, agua dulce o agua salada.

Célula chromista

Tener en cuenta que el reino chromista (basado en los postulados de Thomas Cavalier-Smith) no es aceptado por toda la comunidad científica, por lo que algunos autores engloban a los organismos chromistas en el reino protista.

• Según su número/ agrupación: de organismo unicelular, de organismo pluricelular o de organismo colonial.
• Según el material de su pared celular: celulosa, quitina, cal, sílice, etc.
• Según si realiza o no la fotosíntesis.
• Según su estructura interna: si tiene o no cloroplastos, si tiene clorofila a y b, clorofila a y c o no tiene clorofila.
• Según su alimentación: autótrofa, heterótrofa o ambas.
• Según su reproducción: sexual, asexual o ambas.
• Según su división celular: gemación, esporulación, mitosis o meiosis.
• Según su carga cromosómica: haploide, diploide o poliploide.
• Según el medio en el que habita: ambientes húmedos, agua dulce o agua salada.

Clasificación de la célula según su núcleo u organización

Una célula puede tener (eucariota) o no tener (procariota) núcleo celular definido.

La célula eucariota es aquella que posee un núcleo celular definido con información genética en su interior. Dicho núcleo tienen poros pequeños que permiten el intercambio de información entre el interior del núcleo y el citoplasma celular. Todos los organismos eucariontes (animales, plantas, hongos, protistas y chromistas) están constituidos por una o más células eucariotas.

Son de mayor tamaño y con una estructura más compleja que la de las células procariotas, ADN lineal, mayor número de cromosomas, lípidos enlazados con éster en su membrana citoplasmática, organelos membranosos especializados y pueden realizar procesos como la fagocitosis, pinocitosis y exocitosis. Además, pueden reproducirse sexual o asexualmente, respirar aeróbica o anaerobicamente, emplear un metabolismo fotosintético o heterótrofo y conformar tejidos, dependiendo de la especie y del reino al cual pertenezcan dichas células. Algunas células eucariotas tienen, incluso, dos o más núcleos, como es el caso de algunos hongos o protistas.

La célula procariota es aquella que no posee un núcleo celular verdadero, por lo que el material genético está disperso en el citoplasma celular. Todos los organismo procariontes (arqueas y bacterias) están constituidos por células procariotas. Son unicelulares, pero algunas especies pueden unirse para conformar organismos coloniales.

Las células procariotas son mucho más antiguas que las eucariotas: los primeros seres vivos que poblaron la tierra eran organismos procariontes. Son de menor tamaño y con una estructura menos compleja que la de las células eucariotas, ADN circular, menor número de cromosomas, organelos más simples y se adaptan mejor a condiciones de temperatura, salinidad, acidez, alcalinidad, desecación, presión, radiación y/u oxígeno extremas. No realizan la ciclolisis, fagocitosis, pinocitosis o exocitosis (son osmótrofas), no conforman tejidos, se reproducen asexualmente mediante fisión binaria, esporulación o conjugación procariota, emplean un metabolismo autótrofo o heterótrofo y su respiración puede ser aeróbica o anaerobica, dependiendo de la especie y del reino.

Clasificación de la célula según el reino al cual pertenece el organismo que conforma

Según las características de la célula o células que conforman a un organismo, este pertenece a alguno de los reinos biológicos. Existen ciertos debates acerca de cuantos son los reinos de la vida: hay autores que defienden un sistema de seis reinos (archaea, bacteria, animalia, plantae, fungi y protista) y otros que defienden un sistema de siete reinos (archaea, bacteria, animalia, plantae, fungi, protista y chromista).

Las células arqueas conforman organismos unicelulares o coloniales procariotas de entre 0,1 µm y más de 15 µm, con formas muy diversas (esféricas, redondas, tubulares, aplanadas, rectangulares, espirales, etc.), ADN circular y flagelos. Se reproducen asexualmente, pueden tener un metabolismo autótrofo o heterótrofo, una respiración aeróbica o anaeróbica, viven en todos los rincones de la Tierra (incluyendo ambientes con condiciones extremas), la mayoría tiene pared celular y se caracterizan por tener lípidos enlazados con éteres en su membrana citoplasmática. Muchos de los microorganismos que conforman el plancton y la flora intestinal de diversos animales son arqueas. Hasta hoy no se conocen arqueas parásitas.

Las células bacterianas conforman organismos unicelulares o coloniales procariotas de entre 0,3 µm y 500 µm. Adoptan formas diversas (cocos, bacilos, vibrios, espirilos, etc.) y se movilizan mediante pilis y flagelos. Aunque no tienen núcleo celular definido, tienen una estructura denominada nucleoide, en donde se encuentra el ADN circular de la célula. Se reproducen asexualmente, pueden tener un metabolismo autótrofo o heterótrofo, una respiración aeróbica o anaeróbica, la mayoría tiene pared celular y se caracterizan por tener lípidos enlazados con ésteres en su membrana citoplasmática. Las bacterias pueden clasificarse en Gram positivas o monodérmicas y Gram negativas o didérmicas dependiendo del grosor de su pared celular y de como reaccionan los componentes de la misma ante ciertos pigmentos. Estas células viven en casi todos los rincones de la Tierra, formando relaciones mutualistas, comensalistas y parasitarias con otros individuos o simplemente viviendo libres en medios acuáticos y terrestres.

Las células animales conforman organismos pluricelulares eucariotas de entre un par de milímetros y varios metros. Estas poseen formas muy diversas que dependen de la especie del animal y de la función que cumplan en su organismo: se agrupan para dar origen a tejidos especializados, los cuales conforman órganos y sistemas. Se caracterizan por poseer cilios, flagelos, centriolos y centrosomas, reproducirse sexualmente (pocas especies se reproducen asexualmente), tener un metabolismo heterótrofo, una respiración aeróbica, ADN lineal, excretar principalmente amoniaco (NH₃), no poseer pared celular, plasmodesmos ni plastos y tener una vacuola pequeña en comparación con las células vegetales.

Las células vegetales conforman organismos pluricelulares eucariotas de entre un par de milímetros y varias decenas de metros. Estas se agrupan para dar origen a tejidos especializados que cumplen diversas funciones en el interior de la planta: pueden pertenecer al floema, al xilema, al parénquima, al colénquima, al meristema o al esclerénquima. Se caracterizan por poseer pared celular (compuesta principalmente por celulosa), plasmodesmos, plastos (cloroplastos, cromoplastos y leucoplastos) y vacuolas muy grandes en comparación a otras células eucariotas. Se reproducen sexual o asexualmente, tienen un metabolismo autótrofo (fotosintético), una respiración aeróbica, ADN lineal, son inmóviles y no poseen centriolos, centrosomas, cilios ni flagelos (aunque los espermatozoides de algunas especies de plantas que se reproducen sexualmente tienen flagelos).

Las células fúngicas conforman organismos unicelulares, pluricelulares o coloniales de entre un par de micrómetros y más de un metro. Dependiendo de la especie, las células fúngicas pueden agruparse para conformar estructuras con funciones especializadas: pueden ser células somáticas o células reproductoras. Se caracterizan por ser alargadas y tubulares, conformar hifas (en el caso de los hongos filamentosos), poseer cuerpos de Wöroning y pared celular (compuesta principalmente por glucosa y quitina). Se reproducen sexual o asexualmente (mediante gametos y/o esporas), tienen un metabolismo heterótrofo, respiración aeróbica (pocas especies presentan respiración anaeróbica), ADN lineal, son inmóviles, no poseen centriolos, centrosomas, plastos, plasmodesmos, cilios ni flagelos (con la excepción de las células sexuales flageladas y algunas células de hongos primitivos) y algunas tienen, incluso, varios núcleos celulares. Las células fúngicas pueden asociarse con células de otros reinos y establecer relaciones simbióticas (como los líquenes), mutualistas (como las micorrizas), inquilinistas, parasitarias (como el «pie de atleta») y amensalistas (como la penicilina y las bacterias).

Las células protistas (según el sistema de los seis reinos) conforman organismos unicelulares o coloniales simples de entre un par de micrómetros y varios metros. Son aeróbicas (aunque algunas especies también pueden adaptarse a la ausencia de aire), pueden ser autótrofas (organismos fotosintéticos) o heterótrofas (protozoos) y se reproducen tanto sexual como asexualmente (habiendo especies que emplean ambos tipos de reproducción con gametos y esporas). Las células protistas que conforman organismos coloniales poseen pared celular, plastos y plasmodesmos y, en el caso de las unicelulares, existen cilios, pseudópodos y flagelos que permiten su movimiento. Todas las especies necesitan de ambientes húmedos para vivir y algunas establecen relaciones interespecíficas para formar líquenes, plancton, parasitar o cooperar con otras especies. Según el sistema de seis reinos de la vida, todos los protozoos (dinoflagelados, ciliados, radiolarios y otros ameboides), los oomicetos o pseudohongos y las algas cromofitas son organismos pertenecientes al reino protista.

• Debate entre los seis y siete reinos: quienes defienden el sistema de siete reinos de la vida, agrupan a los protozoarios (en su mayoría organismos unicelulares heterótrofos sin pared celular) en el reino protista y a las algas (en su mayoría organismos unicelulares y coloniales autótrofos con pared celular) en el reino chromista. Quienes defienden el sistema de seis reinos de la vida, agrupan a los organismos del reino protista y a los organismos del reino chromista en un solo reino, el protista.

Las células chromistas conforman organismos unicelulares o coloniales con formas definidas y características muy diversas de entre un par de micrómetros y varios metros. Las células chromistas conforman principalmente a las algas cromofitas: algas rojas o rodofitas, algas unicelulares o diatomeas, algas doradas, algas pardas, algas verdes con clorofila a y b, algas verdes con clorofila a y c y algunas algas verdes sin cloriofila. Las algas presentan pared celular, rodoplastos, cloroplastos y plasmodesmos, se caracterizan por ser organismos simbiogénicos, autótrofos y aeróbicos y se clasifican según si tienen o no cloroplastos, si tienen clorofila a y b, clorofila a y c o no tienen clorofila. En el caso de los organismos heterótrofos pertenecientes a este reino, se caracterizan por tener cilios y flagelos. Todas las especies necesitan de ambientes húmedos para vivir y algunas establecen relaciones interespecíficas para formar, por ejemplo, líquenes o plancton.

Considerando el sistema de siete reinos de la vida, el reino protista incluye, entonces, microscópicos organismos unicelulares heterótrofos, flagelados o ciliados.

Clasificación de la célula según su número o agrupación

Todos los organismos vivos están compuestos por células, ya sea por sólo una o por miles de millones de ellas. Según la cantidad de células que conforman a un organismo y la manera en la que estas se agrupen, dicho organismo puede ser unicelular, pluricelular o colonial.

Organismos unicelulares

Son aquellos que están compuestos únicamente por una célula, por lo que son mucho más simples y primitivos que los organismos pluricelulares. Los primeros organismos que poblaron la Tierra eran unicelulares, y con el pasar del tiempo fueron evolucionando en organismos más complejos: coloniales y pluricelulares. Las arqueas, las bacterias, las cianobacterias, los protozoos y algunos hongos son seres unicelulares.

Organismos pluricelulares

Son aquellos que están conformados por la unión permanente de dos o más células a manera de tejidos especializados en donde cada una de ellas tiene una función específica, por lo que se necesitan las unas de las otras para subsistir. Hay organismos pluricelulares como los seres humanos que están conformados por miles de millones de células. Todos los organismos pluricelulares son eucariotas.

Organismos coloniales

Es muy común que se confundan a los organismos pluricelulares con los organismos coloniales, y si bien, ambos están conformados por la unión de dos o más células, no poseen las mismas características de agrupación. Los organismos coloniales son aquellos que están conformados por la agrupación temporal o permanente de células autosuficientes con características similares que cooperan entre si. Éstas agrupaciones se dan por interés mutuo de todos los organismos unicelulares (que pueden ser procariotas o eucariotas) que conforman al organismo colonial, de manera tal que la unión de todas conforman un solo ente. No se conforman tejidos porque no ocurre la especialización de células. Como ejemplos de organismos coloniales están varios tipos de algas como el Volvox y algunos hongos.

Clasificación de la célula según su tamaño y forma

Una célula puede ser de tamaño microscópico o de tamaño macroscópico. La gran mayoría de las células existentes son microscópicas, es decir, que requieren de un microscopio para observarse porque no son visibles a simple vista. Como ejemplos de células macroscópicas, que son observables sin la necesidad de utilizar microscopios, tenemos algunas algas, bacterias y óvulos de mamíferos, aves, anfibios y peces.

El tamaño de las células puede variar entre las 0,5 micras y los varios metros. La micra, micrómetro o micrón es una unidad de medida de longuitud utilizada para medir organismos muy pequeños. Una micra (1 µm) equivale a una milésima parte de un milímetro.

1 µm = 1 micrómetro o micra = 0,001 milímetros = 0,000001 metros

El tamaño depende de la especie del organismo y de la función de cada célula. Las células eucariotas son, en general, más grandes que las células procariotas. Una célula procariota promedio ronda entre los 0,1 y los 40 µm de largo y entre 0,1 y 2 µm de diámetro, aunque hay bacterias que miden hasta 750 µm de largo. Una célula eucariota promedio va desde los 10 a los 100 µm de longuitud, aunque:

• Los óvulos humanos miden entre 140 y 150 µm, es decir 0,14 o 0,15 milímetros.
• Los espermatozoides humanos miden entre 50 y 60 µm.
• Hay partículas de polen que pueden alcanzar los 200 o 300 µm, es decir 2 o 3 milímetros.
• Algunos flagelados pueden llegar hasta los 500 µm y algunas amebas hasta 800 µm.
• Los huevos no fecundados u óvulos de las aves, peces y anfibios, que son células sexuales, miden hasta 25 centímetros de largo, como es el caso de los huevos de avestruz.
• Las neuronas de los humanos miden hasta 1,5 metros de largo y las de algunos otros animales pueden alcanzar los varios metros.
• Algunas algas unicelulares pueden crecer varios metros de largo.

Las células tienen formas muy diversas que vienen dadas por su origen y su función. Pueden ser poligonales, estrelladas, circulares, ovaladas, alargadas, cilíndricas o pueden no tener una forma definida. Las células igualmente suelen tener volumen, muy pocas son completamente planas.

Las células de archaeas y bacterias presentan formas lobuladas, planas, poligonales, pleomórficas, amorfas, de coco, bacilo, vibrio o espirilo, entre otras. La células vegetales suelen tener formas poligonales. En la células fúngicas suelen formarse hifas, que son estructuras cilíndricas, largas y ramificadas. En las células animales, protistas y chromistas suelen presentarse cilios, pseudópodos y flagelos que les dan una apariencia alargada y permiten su movimiento.

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Clasificación de la célula según su función

De la unión de muchas células surgen los tejidos, los cuales aparecen únicamente en seres pluricelulares. Cada tejido tiene una función específica que está delimitada por la células que lo conforman.

Por ejemplo, las plantas poseen tejidos fundamentales, meristemáticos, conductores y protectores. Cada tejido está conformado por células del xilema, floema, parénquima, colénquima o esclerénquima y cada tipo de célula posee adaptaciones morfológicas y fisiológicas especializadas que les permiten realizar sus funciones específicas. Los animales poseen tejidos epiteliales, musculares, conectivos y nerviosos que están compuestos por células especializadas con tamaños y formas acordes a su función.

Según el tejido al cual pertenezcan y la función que realicen, las células pueden variar sus dimensiones, cantidades, formas y localización. Por ejemplo:

• Un espermatozoide es una célula reproductiva masculina. Su función es fecundar al óvulo (célula reproductiva femenina), su tamaño es casi 1/3 del de un óvulo promedio, son alargados con flagelos que permiten su movimiento y se producen en los testículos masculinos en grandes cantidades para garantizar que ocurra la fecundación (en cada eyaculación hay cientos de millones de espermatozoides).
• Un glóbulo rojo corresponde a una célula sanguínea, al igual que los glóbulos blancos y las plaquetas. Mide entre 6 y 8 µm, son redondeados, su función es transportar oxígeno a través de la sangre y diariamente se producen miles de millones de ellos.
• Las células del parénquima clorofílico conforman gran parte de las hojas de la plantas. Pueden ser empalizadas o esponjosas, alargadas o circulares, tienen una o varias vacuolas grandes que permiten el almacenamiento de agua, numerosos cloroplastos para la realización de la fotosíntesis y pared celular primaria que permite la transferencia de nutrientes e información.

Clasificación de la célula según su pared celular y organelos

Se puede clasificar a las células según si tienen o no pared celular y el material del cual está hecha dicha pared. En las células arqueas, bacterianas, vegetales, fúngicas y protistas existe pared celular. Una pared celular es una capa dura, rígida y resistente adherida a la capa más externa de la membrana citoplasmática que protege a la célula, delimita su forma y tamaño y regula lo que ingiere y lo que excreta. Según el reino y la especie a la cual pertenezca cada organismo, su pared celular posee características específicas que le permiten realizar sus funciones vitales. En general, las paredes celulares están constituidas por proteínas, glúcidos, lípidos, fosfolípidos (glicerofosfolípidos), monosacáridos (glucosa) y/o polisacáridos (glucógeno, galactosa, calosa), combinados en proporciones diversas para cada especie, aunque:

• La pared celular de las arqueas suele ser de proteínas, glúcidos y pseudopeptidoglicano. No todas las arqueas tienen pared celular.
• La pared celular de las bacterias es principalmente de peptidoglucano y algunas presentan ciertas proteínas. No todas las bacterias tienen pared celular.
• Las células animales no poseen pared celular.
• La pared celular de las plantas es bastante compleja. Suele tener tres capas fundamentales: la pared primaria (la más gruesa, compuesta de varias capas de celulosa), la pared secundaria (pared más interna, ubicada entre la membrana celular y la pared celular primaria) y la laminilla media (unión entre células adyacentes, capa más externa de la pared celular) y está compuesta principalmente por celulosa, además de glúcidos (pectina), proteínas y otros polímeros. Aunque no todas las plantas poseen células con pared celular, si la mayoría de ellas.
• La pared celular de los hongos está conformada por glucanos, glicoproteínas y quitina. No todas las especies de hongos tienen células con pared celular.
• La pared celular de las algas cromófitas (consideradas parte del reino protista según la clasificación de los seis reinos de la vida o del reino chromista según la clasificación de los siete reinos de la vida) está constituida por celulosa, glucoproteínas, cal, silicio y/u otros polisacáridos, variando según la especie.

Además de las paredes celulares, existen ciertos organelos y estructuras características de ciertas células que sirven para clasificarlas según su anatomía y fisiología. Por ejemplo:

• Los núcleos celulares: si tiene o no tiene núcleo celular verdadero y en el caso de tener, su cantidad.
• Si tiene o no tiene plasmodesmos, plástidos (cloroplastos, leucoplastos o cromoplastos), mitocondrias, retículo endoplasmático, aparato de Golgi, centrosomas, mesosomas, capsulas, pilis, entre otros.
• Si tiene o no tiene vacuolas, cuántas tiene y su tamaño.
• Si posee movilidad o no y que estructura locomotora tiene: cilios, psudópodos, flagelos, entre otros.

Clasificación de la célula según su respiración y su alimentación

Una célula puede o no necesitar la presencia de aire para subsistir: su respiración puede ser aeróbica o anaeróbica.

• Los organismos aeróbicos tienen células que necesitan la presencia de aire para realizar sus funciones vitales. Generalmente los organismos eucariontes son aerobios, por lo que presentan mitocondrias que llevan a cabo la respiración, degradando la glucosa y el oxígeno en agua y dióxido de carbono. Los animales, las plantas, los hongos, las algas e incluso algunas bacterias y arqueas son organismos aeróbicos.
• Los organismos anaeróbicos tienen células que no necesitan la presencia de aire para realizar sus funciones vitales. Sustituyen el oxígeno por moléculas como el sulfato, carbonato o nitrato. Muchas bacterias y arqueas y algunos pocos protozoos y gusanos son organismos anaeróbicos.
• Existen organismos que son tanto aeróbicos como anaeróbicos debido a su gran adaptabilidad a ambientes extremos. Algunas bacterias y arqueas extremófilas pueden vivir con o sin presencia de oxígeno.

Si clasificamos a los organismos vivos según su manera de nutrirse y obtener energía, estos pueden ser autótrofos o heterótofos.

• Los organismos que son capaces de sintetizar su propio alimento se denominan autótrofos o fotosintéticos. Obtienen su energía mediante la fotosíntesis y representan el primer eslabón de todas las cadenas tróficas porque son la fuente de energía de todos los organismos heterótrofos, directa o indirectamente.
• Los organismos que obtienen nutrientes y energía mediante la ingesta y digestión de otros organismos se denominan heterótrofos, independientemente de si son herbívoros, carnívoros, omnívoros, parásitos o carroñeros.

Los animales, los hongos, gran parte de los protistas y la mayoría de las arqueas y bacterias son organismos heterótrofos con células que no pueden llevar a cabo la fotosíntesis porque carecen de cloroplastos y clorofila.

Las plantas, algas, cianobacterias y algunas arqueas son organismos fotoautótrofos o autótrofos fotosintéticos porque tienen la capacidad de sintetizar su propio alimento mediante la transformación de CO₂ (dióxido de carbono), H₂O (agua) y luz solar en azúcares (C₆H₁₂O₆, glucosa) y O₂ (dioxígeno). Esto es posible gracias a sus cloroplastos, que son pequeños organelos en los cuales se encuentra la clorofila, el pigmento que permite que se lleve a cabo la fotosíntesis y da el característico color verde a las plantas y algunas algas. Sólo las células fotosintéticas poseen cloroplastos y aunque existen varios tipos de clorofila (clorofila a, b, c, etc.), todas llevan a cabo la fotosíntesis.

La quimiosintiesis es otro tipo de autotrofia mucho menos común que ocurre en ciertas especies de bacterias y arqueas autótrofas quimiosintéticas. Es un proceso en el cual se obtiene energía mediante una reacción química de oxidación que involucra elementos como el carbono, el hidrógeno, el nitrógeno y el azufre, además del oxígeno.

Clasificación de la célula según su división celular, reproducción y carga cromosómica

La división celular es el proceso mediante el cual una célula se divide para originar células nuevas. Según las características de cada célula, su proceso de división celular será diferente. La división celular se puede llevar a cabo mediante fisión binaria, gemación, esporulación, mitosis o meiosis.

• A considerar: cuando se habla de organismos unicelulares, los métodos de reproducción asexual son sinónimo de los procesos de división celular. De la división de un organismo, la célula madre, se originan nuevos organismos, las células hijas.

La fisión binaria o bipartición es un proceso de división celular similar a la mitosis, aunque mucho menos compleja, que ocurre en la gran mayoría de las bacterias, arqueas y en algunos protozoarios. Como los procariontes son organismo unicelulares, solo poseen un ADN circular y tienen menos organelos más simples que las células eucariotas, el proceso de replicación y separación es mucho más rápido y sencillo, culminando de igual manera en la citocinesis (en este caso, creación de nuevos individuos). Básicamente es la fragmentación de una célula procariota madre en dos células procariotas hijas iguales.

La gemación es un tipo de división celular que se basa en la formación de una nueva célula a manera de brote o protuberancia en otra célula ya existente, que va creciendo poco a poco hasta formar un nuevo individuo que finalmente se separa de la célula original. Ocurre en algunos hongos, animales (como las esponjas o estrellas de mar) y bacterias.

La esporulación es un tipo de división celular que se basa en la formación de esporas y endoesporas. Estas son células de cubiertas resistentes parecidas a los gametos sexuales que pueden originar nuevos organismos en condiciones adecuadas. Una espora puede tener una carga cromosómica completa y poder germinar por si sóla (diploide) o tener una carga cromosómica incompleta y necesitar de otra espora para poder germinar (haploide). Los hongos, algunas bacterias, algas y plantas se reproducen mediante esporas.

La mitosis es el proceso mediante el cual una célula somática diploide se divide en dos células somáticas diploides iguales, con la misma carga genética y las mismas características de la célula original. Está comprendida por una serie de fases: interfase, profase, prometafase, metafase, anafase y telofase, hasta que finalmente ocurre la citocinesis y de una célula madre nacen dos células hijas iguales. Se caracteriza por la presencia de centrómeros, huso acromático o miótico, microtúbulos y cinetocoros. Las células animales, vegetales y protistas dividen sus células mediante mitosis.

En el caso de los hongos, los musgos y las algas también ocurre la mitosis, con la diferencia de que sus células son naturalmente haploides (por eso son llamados haplobiontes). Pasan la mayor parte de su vida teniendo células haploides, hasta que llega el momento de la formación del cigoto al reproducirse y pasan a ser diploides por un breve tiempo.

La meiosis es el proceso de división celular en la que una célula diploide genera cuatro células haploides hijas. Por lo general, la meiosis se utiliza solo para las células sexuales en la formación de gametos: para la creación de óvulos y espermatozoides. Las células producidas por la meiosis tienen sólo la mitad de su carga cromosómica total con el fin de fusionarse con la célula sexual complementaria (óvulo con espermatozoide, gameto femenino con gameto masculino).

Los hongos dividen sus células haploides mediante meiosis para engendrar nuevas células haploides: las meioesporas, esporas que intervienen en la reproducción sexual y asexual.

Según el método de reproducción que un organismo emplee, pueden clasificarse sus células. Los organismos que emplean la reproducción sexual poseen gametos o células sexuales especializadas que necesitan fecundarse para poder conformar un nuevo individuo. Los organismos que emplean la reproducción asexual poseen la capacidad de originar nuevos individuos sin necesidad de la participación de otro organismo de su misma especie.

La reproducción sexual es aquella en la que se necesita de un óvulo y un espermatozoide para que se forme el cigoto. Se basa en la combinación de material genético de ambos progenitores y se produce solo en organismos eucariotas pluricelulares. Los animales, las plantas, los hongos y algunos protistas pluricelulares se reproducen sexualmente mediante coito, semillas, esporas, etc.

La reproducción asexual es aquella en la que una célula nace de otra célula ya existente. En el proceso solo se involucra un individuo, que mediante mitosis, fisión binaria, gemación, esporulación, fragmentación o partenogénesis logra engendrar descendencia. Casi todas las bacterias y arqueas y la mayoría de los protistas unicelulares se reproducen asexualmente. Un pequeño porcentaje de animales presentan reproducción asexual, como algunos gusanos, estrellas de mar y esponjas. La mayoría de los hongos y plantas pueden reproducirse tanto sexual como asexualmente, lo que garantiza que puedan generar descendencia a pesar de ser inmóviles.

En el caso de los seres pluricelulares, podemos diferenciar sus células entre si según la cantidad de cromosomas que posea su núcleo: una célula puede ser somática (diploide) o sexual (haploide).

Las células somáticas corresponden a todas las células del cuerpo a excepción de las células sexuales. Son diploides, por lo que tienen una carga cromosómica completa: en los seres humanos, las células somáticas o diploides disponen de 46 cromosomas emparejados, para un total de 23 pares de cromosomas. Se reproducen mediante mitosis y se representan como «2n».

• Recordar que: los hongos, los musgos y las algas son haplobiontes, por lo que pasan la mayor parte de su vida teniendo células haploides, hasta que llega el momento de la formación del cigoto al reproducirse y pasan a ser diploides por un breve tiempo.

Las células sexuales o gametos son las únicas células no somáticas del cuerpo. Tienen como único propósito fecundarse (en el caso de ser óvulos) o fecundar (en el caso de ser espermatozoides) y originar un nuevo organismo. Son haploides, por lo que tienen una carga cromosómica incompleta: en los seres humanos, los óvulos y los espermatozoides, de 23 cromosomas cada uno, se necesitan el uno del otro para completar su carga cromosómica y lograr la formación de un cigoto diploide con 46 cromosomas. Se reproducen mediante meiosis y se representan como «n».

Óvulo (23 cromosomas) + Espermatozoide (23 cromosomas) = Cigoto (46 cromosomas)

Célula haploide + Célula haploide = Célula diploide con carga cromosómica completa

n + n = 2n

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